viernes, 20 de agosto de 2010

DUDAS RAZONABLES

Comenzamos tras este paréntesis estival que nos ha venido bastante bien en estos asuntos de la investigación de los inicios del fútbol sevillano.

Hay páginas béticas que nos comienzan a sorprender y que empiezan a reconocer el nacimiento del equipo bético más cercano de finales de la primera decena del siglo XX que de 1907.

Hemos de decir que desde aquí pensamos que no es necesario descartar definitivamente ese año, ya que antes de que los equipos determinasen oficializarse es muy posible que llevasen un tiempo antes practicando lo que se conocía en aquella época como el “Sport”, por lo tanto 1907 es posible, lo que ocurre es que no existe ni una sola noticia, ni tan solo un indicio de que esto fuese así.

Hoy en día tan solo podemos barajar la pista de Gil Gómez Bajuelo, “Discóbolo”, pero ya hemos demostrado que es muy posible que este presidente bético confundiese las fechas, aunque hay quien se empeña en no reconocer lo evidente.

Sin embargo nos encontramos con algunas dudas razonables sobre algunas cuestiones que nos llaman poderosamente la atención, pues no somos capaces de encajarlas en el tiempo.

Por un lado, y desde este mismo blog, descubrimos un suelto periodístico que nos hablaba del nacimiento de un club llamado “España Balompié” datado el 12 de septiembre de 1908 en el periódico “El Imparcial”. Se trataba de la primera noticia existente de los predecesores del club verdiblanco.

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Basándonos en las declaraciones del mismo “Discóbolo” y de unos de los primeros presidentes balompedistas, como fue Juan del Castillo, pensamos en primera instancia que efectivamente eran esos los inicios, no nos cabía la menor duda, pero con un nuevo descubrimiento de nuestro incansable investigador y  amigo Antonio Ramírez  esta cuestión ha dado un giro de 180º, con lo que se demuestra que en estas cuestiones nadie puede decir que está en posesión de la verdad, porque en ese caso está condenado al fracaso y al ridículo más absoluto. Nuestros ancestros no nos lo pusieron nada fácil y es necesario investigar muy a fondo para poder llegar a algunas conclusiones que seguramente serán discutibles.

El descubrimiento del diario “Sevilla” de 31 de enero de 1909 en cuestión es este:

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En efecto, podemos observar cómo el equipo que fue llamado a fusionarse con el “Real Betis FC”, (no confundir con el “Betis FC” ya que fue otro completamente distinto), se fundó exactamente el 1 de febrero de 1909, por lo que nos surgen las siguientes dudas:

1 .- ¿Puede un club fundarse dos veces?

Tal y como podemos observar en los sueltos periodísticos, ambos nos dicen que el club al que se refieren se acaba de constituir, el primero como “España Balompié” y el segundo como “Sevilla Balompié”.

2.-  ¿Se trata entonces de dos clubes distintos?

Ante ello podemos pensar que efectivamente se trataba de dos clubes distintos ante la evidencia tan meridiana, podemos hablar de “constituciones distintas jurídicamente hablando” pero no podemos afirmarlo alegremente ya que tanto “Discóbolo” como Juan del Castillo, 48 años después, nos cuentan que el equipo se constituyó primero como “España Balompié” y más tarde decidieron bautizarlo con el nombre de la ciudad. Estos testimonios no podemos descartarlos, entre otras cosas porque Juan del Castillo fue socio fundador y primer tesorero balompedista por lo que merece toda la credibilidad.

3.- ¿Tuvieron los mismos componentes?

Aquí es donde nos podemos perder con más facilidad ya que sobre el “España Balompié” tenemos muy pocas noticias, por no  decir ninguna, más que la crónica a la que nos referimos.

Juan Castro Prieto en su libro “Primeros pasos del Fútbol sevillano, 1890-1915” nos cuenta que pudo haber una crisis entre los primeros balompedistas que no se pusieron de acuerdo con el nombre que el club debió abanderar, teniendo a los máximos defensores de la nomenclatura “España” en los hermanos Hermosa, siendo lo Gutiérrez los paladines del nombre “Sevilla”, consiguiendo ser esta última opción la  vencedora.

Pero de momento solo podemos movernos en el terreno de la conjetura y en mi corto entender, hasta que las investigaciones en el fútbol sevillano avancen, es muy posible que los jugadores del Balompié fuesen iniciados en los distintos “Teams” con los que contaba el “Sevilla Football Club” y aprendiesen el nuevo sport entre sus filas.

Me baso en esto debido a que los pioneros del Balompié, no todos pero sí en su mayoría, no fueron estudiantes en el extranjero como sí ocurrió con los fundadores sevillistas que prácticamente importaron el Football debido a que lo jugaron en los países a los que fueron enviados a estudiar, principalmente al Reino Unido, Suiza y Francia.

Por lo tanto estos jugadores que fundaron el nuevo club que estaba llamado a ser el rival histórico de la Sociedad de Football de Sevilla, (o si lo prefieren “Sevilla FC”), tuvieron que ejercer el aprendizaje en algún sitio y no hubo otro mejor que en la misma ciudad dentro de las filas sevillistas.

Por otro lado hemos visto cómo frecuentemente en aquellos años posteriores, todas las desavenencias estaban fundadas en que los “equipiers” querían jugar en los primeros equipos y si no era así, era suficiente razón como para  fundar un club en el que jugar en primera línea, como así vimos en los jugadores de  otros equipos sevillanos posteriormente. De hecho el Balompié debe “desafiar” al Sevilla FC comenzando a jugar contra los teams de inferior categoría sevillistas, en un proceso que duraría varios meses hasta poder enfrentarse al primer equipo del decano sevillano.

Otra cuestión podría haber sido la ideológica ya que el principio común de los balompedistas era que pertenecían al mundo militar con la idea de “España” como elemento patriótico,  frente a los regeneracionistas sevillistas, hombres con nuevas ideas procedentes de Europa  y muy republicanas. De hecho es el “España Balompié” el que posiblemente le pida a Mariano de Cavia, eminente periodista preocupado por la pureza de la lengua española, que españolice el vocablo “Football”, siendo esta una cuestión muy importante para fundamentar esta teoría.

Queda mucho por investigar de estos “sportmen” y muchas sorpresas podemos llevarnos en adelante por lo que no afirmamos nada categóricamente, pero conforme podemos darle un sentido a estas cuestiones las vamos contando a nuestros lectores, muchos béticos por cierto, interesados en esta bella historia de todos.